Me parece increíble no haber hablado ni una sola vez en el blog de una de mis mayores pasiones, la moda. Aunque todo sea dicho, tampoco es que este verano haya estado muy marcado por la gran cantidad de posts publicados, ya que escribir es mi debilidad, si no que más bien han brillado por su ausencia.
Con Septiembre empezado y mi cabeza repleta de ideas que aún no han descubierto el camino para salir a la luz, me dispongo a no dejarme amedrentar por todo lo que espera por acontecer, a pesar de las muchas ganas que siento por empezar una nueva etapa alejada de la universidad, pero en ocasiones desanimada por la lentitud con la que ahora avanzan posiciones mis fichas en el mundo del Periodismo. Asumo con bastante optimismo esta nueva situación, pero por si acaso he cargado la despensa de chocolate para los días en los que estaré más baja de moral y encarando el final del verano con ilusión por las nuevas tendencias que están por llegar.
Sin más dilaciones, me despido hoy con una imagen que vale más que mil palabras: Una fotografía de Sarah Jessica Parker, una de mis actrices favoritas, una mujer admirable porque ha lucido mejor que ninguna cuando no todos creyeron en su belleza, porque desde pequeña trabajó duro para labrarse un camino interpretando y porque ella le puso cara y alma a Carrie Bradshaw, la debilidad ficcionaria de toda una generación de mujeres que ha querido ponerse en sus zapatos. Tal y como SJP afirmó en una ocasión “Fashion is not a luxury, it’s a right”, cuando leo su cita en mi escritorio, me reafirmo a seguir luchando por mi ideal.
memoriasdeunajovenperiodista 
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